DitoBanx

DitoBanx es el fruto de 18 años de experiencia en el sector tecnológico por parte de sus fundadores.
La oportunidad surgió con la promulgación de la ley en El Salvador que convirtió al Bitcoin en moneda de curso legal.
Esta ley abrió puertas más allá del simple uso de la moneda, presentando una oportunidad para crear soluciones financieras globales que pudieran beneficiar a las personas no bancarizadas.
La idea nació con la inspiración de construir un futuro financiero accesible para las próximas generaciones, quienes enfrentarán un mundo donde la globalización y el acceso a herramientas financieras serán fundamentales para su crecimiento económico.
Esta visión, tanto personal como global, fue el catalizador para la creación de DitoBanx, una empresa comprometida con la inclusión financiera y con preparar a la sociedad para los desafíos económicos de la próxima década.

Nuestra misión es empoderar a personas y empresas con soluciones financieras digitales que no solo simplifiquen la gestión diaria de sus recursos, sino que también promuevan la inclusión y la equidad en el acceso a los servicios financieros. Nos dedicamos a crear un ecosistema financiero más accesible y eficiente, donde cada usuario se sienta valorado y respaldado.

Aspiramos a ser la referencia global en innovación financiera, donde la tecnología y el propósito se unen para transformar la vida de millones de personas. Nos vemos liderando un cambio hacia un sistema financiero más inclusivo y responsable, donde el progreso económico y social caminen de la mano.

En DitoBanx, estamos comprometidos con la inclusión financiera de la población no bancarizada.
Nuestro enfoque en la tecnología financiera nos permite ofrecer herramientas que, en menos de cinco minutos, brindan acceso a servicios esenciales como transferencia de dinero a nivel global, la redención de remesas, y el acceso a tarjetas de crédito o débito según el país en el que operemos.
Estas soluciones no solo facilitan la vida cotidiana, sino que también abren la puerta a que las personas puedan convertirse en emprendedores digitales, permitiendo al segmento no bancarizado acceder a servicios de salud de calidad, comprar materias primas e insumos para sus negocios, estas personas sufrían de falta de servicios básicos o les tocaba caminar tres horas para poder hacer el pago de un recibo de agua o luz y ahora lo pueden hacer desde su teléfono.
Esto es lo que estamos cambiando, empoderamos a nuestras comunidades con las herramientas que les proveemos. Este cambio, sin embargo, va de la mano de la educación financiera, clave para que puedan aprovechar al máximo las oportunidades que les brindamos para poder formar parte de un mundo globalizado